La experiencia del multilingüismo vista por una madre......lingüista
Para conocer el fenómeno del bilingüismo/multilingüismo no basta preguntarse sobre los mecanismos biológicos de adquisición de lenguaje, sino que hay que interesarse también por lo que representa una lengua, por la naturaleza de sus vínculos sociales que ella crea y mantiene. B. Abdelilah-Bauer.

lunes, 13 de agosto de 2012

El curioso caso de las Segre

Vaya por delante que me encanta hablar con ellas por lo divertidas que son, por las sonrisas con las que hablan, y por las lenguas que usan.

Son 4 hermanas argentinas, que nacen, crecen y se escolarizan en Buenos Aires (el querido).

Acompañando a los padres se van (o se vienen) a Brasil durante 4 años, donde algunas estudian en la Universidad y otras la enseñaza secundaria.

Unas se quedan en Brasil y otras, acompañado a los padres, se vuelven a Argentina.

Después de 10 años 3 de ellas viven en la misma ciudad de Brasil y la otra sigue en Argentina.

Entre las 3 de Brasil se hablan en portugués. Con la hermana que vive en Bs As y con la madre hablan en español y/o portugués. A los hijos que las 3 tuvieron los hablaron siempre en portugués, así como a sus parejas. Dos de ellas trabajan con el español.

La abuela les habla a los nietos en el portugués que aprendió hace másd e 20 años años en los 4 años que vivió en Brasil, y compensa el desconocimiento en español, y los nietos le responden en portugués.

Algunos de los hijos han estudiado español como lengua...?extranjera? y son alumnos listísimos, claro, cuya autoridad lingüística no es el profesor ;-) pero fonéticamente suenan como extranjeros, según la madre.

Las 3 que viven en Brasil tienen el mismo grado de dominio de las dos lenguas, brasileñas y/o argentinas cuando hablan portugués y/o español.

Son un ejemplo viviente más de la idea de que no se cambia la lengua en la que se conoce a alguien. Las lenguas se cambian y cambian. Así como nosotros.

P.S.: que dice una de ellas que acepta preguntas, aprovechad

sábado, 11 de agosto de 2012

“Tadito”: -ito como marca del español


Cuando Nicolás tenía un mes y medio nos fuimos unos días al campo, y hacía un frío espantoso. Estaba yo con el bebé en brazos y coincidí con una niña de 7 años que cuando me vio con él me preguntó, en portugués, Quanto tempo ele tem? Le respondí, también en portugués, um mês e meio, y con sólo estas cuatro palabras (4 – cuatro!) me dijo, Você é espanhola? Yo pensaba ya que la niña era un prodigio y una fonetista en ciernes, pero me aclaró eu também hablo español, eu estudo no Colégio español de São Paulo. Así, con esas diferenciaciones (que no mezclas) tan específicas.

Le dije que qué bien que hablara español, que se notaba que estudiaba mucho y tal. Le dije después que me iba porque con el bebé porque hacía frío y me dijo sí, faz frio para ele, tadito! Y ese “tadito” le salió con el acento más castellano del mundo.


Ni que decir tiene que tadito o tadita, con sus plurales correspondientes, continua hasta hoy en nuestro vocabulario familiar más que vigente.

P.D. Esta foto que viene abajo, la cuelgo en 2014 y desde Portugal. Sólo para desdecirme el post!